Diferencia entre revisiones de «GARCÍA ICAZBALCETA, Joaquín»
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(México, 1825; México, 1894) Historiador y Filólogo
El décimo y último hijo del matrimonio de Eusebio García Monasterio y Ana Ramona Icazbalceta fue el polémico historiador Joaquín García Icazbalceta, quien nació en la ciudad de México el 21 de agosto de 1825. Cuando Joaquín estaba por cumplir los cuatro años de edad el gobierno de Guadalupe Victoria proclamó (20 de marzo de 1825) un inicuo decreto que expulsaba de México a toda persona nacida en España, junto con su cónyuge e hijos.
“La expulsión de los españoles del territorio de la República era uno de los dogmas políticos fundamentales de (Vicente) Guerrero y de los yorkinos (…) Mientras se discutía la aprobación de la ley en el Congreso, las esposas, hijas e hijos de los españoles llenaban las galerías interrumpiendo a veces con sus sollozos y lamentos a los oradores"[1]. Y como don Eusebio García había nacido en la Rioja, España, toda su familia fue desterrada de México viéndose obligada a trasladarse a Cádiz. Para 1835 las luchas de las logias escocesas contra las yorkinas llevaron a dejar sin efecto el decreto de expulsión, y en 1836 la familia García Icazbalceta pudo regresar a México. El joven Joaquín, que había realizado sus primeros estudios en instituciones escolares en Cádiz, a su regreso a México tuvo que proseguir sus estudios con maestros particulares pues las instituciones educativas mexicanas estaban siendo hostilizadas por los gobiernos liberales; incluso la Universidad de México↗ fue clausurada en 1833.
La amistad que la familia García-Icazbalceta tenía con don Lucas Alamán↗ permitió al joven Joaquín recibir del célebre político valiosos consejos que le ayudaron a definir su vocación por el estudio e investigación de la Historia de Hispanoamérica, así como el estudio de las lenguas indígenas. Inició entonces una importante labor de búsqueda de manuscritos originales y todo tipo de documentos referentes a la Historia de México, los que, tras clasificarlos y estudiarlos, editaba en una pequeña imprenta que había instalado en su casa. Con ellos elaboró una Colección de Documentos para la Historia de México, que en 1856 publicó en dos volúmenes.
Treinta años después, entre 1886 y 1892 dio a conocer su Nueva Colección de Documentos para la Historia de México, la cual abarcaba ya cinco volúmenes. La Nueva Colección de documentos para la historia de México, fue publicada de 1886 a 1892 por el mismo Icazbalceta. Esta colección, llamada «nueva» porque Icazbalceta había publicado antes otra –de 1858 a 1870-, abarca cinco volúmenes, importantes todos ellos, pero de mayor utilidad los dos primeros (1886 y 1889). Contienen numerosas cartas y relaciones de religiosos y la mayor parte del segundo está formada por la colección de piezas referentes a los franciscanos conocida con el nombre de Códice Franciscano. En él se halla una multitud de informes acerca de los procedimientos de evangelización de dichos religiosos.[2]
Tradujo del inglés al castellano la Historia de la Conquista del Perú de William H. Prescott, adicionándola con interesantes comentarios personales; de esta obra realizó dos ediciones (1849 y 1850). Entre 1852 y 1856 colaboró con don Manuel Orozco y Berra en la redacción del Diccionario Universal de Historia y Geografía. En 1854 contrajo matrimonio con la señorita Filomena Pimentel y Heras, con quien procreó dos hijos: Luis y María Gracia. En 1866 publicó un catálogo de escritores en lenguas indígenas de América. También publicó algunos documentos importantes como Carta de Hernán Cortés al Emperador Carlos V (1855), la Historia Eclesiástica Indiana de fray Jerónimo de Mendieta↗ (1870); Arte de la lengua maya de fray Gabriel de San Buenaventura (1888), Opúsculos inéditos, latinos y castellanos, de Francisco Javier Alegre↗ (1889). De todas estas publicaciones García Icazbalceta escribió amenos y enriquecedores prólogos. Joaquín García Icazbalceta fue miembro fundador de la Academia Mexicana de la Lengua, tomando posesión de la silla III el 25 de septiembre de 1875; fue Secretario de la Academia hasta 1883 cuando se le designó Director de la misma, cargo éste que desempeñó hasta su muerte.
Sus trabajos de investigación histórica le llevaron a escribir en 1881 una biografía de fray Juan de Zumárraga↗ en la cual refutaba, con sólidos argumentos, los ataques infundados que sobre el primer obispo de México difundía la ya en boga historiografía liberal y protestante. Ciertamente la bien documentada biografía de Zumárraga escrita por García Icazbalceta logró restaurar la gran importancia que tuvo el desempeño del obispo en la defensa de los indígenas↗ y en la conformación de la Nación mexicana, pero fue también el inicio de la vertiente más polémica del historiador, pues siendo Zumárraga protagonista fundamental del Acontecimiento Guadalupano, García Icazbalceta no encontró documento alguno del Prelado o de los primeros misioneros franciscanos↗ que hiciera referencia a la Aparición de Nuestra Señora por lo que no hizo mención alguna al hecho.
Entonces el Arzobispo de México Pelagio Antonio Labastida y Dávalos↗ le demandó su silencio y en respuesta García icazbalceta escribió una carta privada al Arzobispo titulada Carta acerca del origen de la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe en la cual da sus razones para considerar que la Aparición no era verdadera. Pero el escrito se hizo público y fue llamada la Carta Antiaparicionista. “Publicada originalmente en 1896, la «Carta Antiaparicionista» de Joaquín García Icazbalceta tuvo un impacto muy relevante en el pensamiento teológico e histórico de su época. Como es de notarse en el texto, Icazbalceta responde a las inquietudes del Arzobispo acerca de la opinión que como historiador tenía él sobre las apariciones guadalupanas. El autor respondió al prelado de forma privada y con un enfoque puramente histórico. Sin embargo, la carta fue vista por terceros y copiada un sinnúmero de veces. Icazbalceta fue entonces invitado a darla a la imprenta, pero su negativa fue absoluta. A pesar de ello, y con base en una de las copias que circulaban ya, surgió una impresión del texto traducido al latín, que fue de nuevo vertida al castellano por Fortino Hipólito Vera. Ninguna de las versiones publicadas entonces, sin embargo, contenían el texto íntegro ni la esencia epistolar de la carta de Icazbalceta.” [3]
Joaquín García Icazbalceta falleció en la ciudad de México el 26 de noviembre de 1894; dejó inconcluso un Vocabulario de mexicanismos, el cual fue publicado en 1905 por su hijo Luis García Pimentel.
Obras:
''Colección de Documentos para la Historia de México. (Dos volúmenes) 1856
Catálogo de escritores en lenguas indígenas de América. 1866
Biografía de fray Juan de Zumárraga. 1881
Carta acerca del origen de la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe. 1883
Nueva Colección de Documentos para la Historia de México. (Cinco volúmenes) 1886-1892
Vocabulario de mexicanismos (Inconcluso) Publicado post-mortem 1905''
NOTAS:
- ↑ Schlarman Joseph H.L.. México, tierra de volcanes. Ed. Porrúa, México, 14 edición, 1987, p.294
- ↑ Ricard Robert. La conquista espiritual de México. Ed. Fondo de Cultura Económica, México, 2002, pp. 47-48
- ↑ http://www.proyectoguadalupe.com/documentos/carta_icazbalceta.html
BIBLIOGRAFÍA:
Galindo y Villa Jesús, García Izcalbaceta, Biografia y Bibliografía. MBM, México, 1927
Schlarman Joseph H.L.. México, tierra de volcanes. Ed. Porrúa, México, 14 edición, 1987
Ricard Robert. La conquista espiritual de México. Ed. Fondo de Cultura Económica, México, 2002
http://www.proyectoguadalupe.com/documentos/carta_icazbalceta.html
JUAN LOUVIER CALDERÓN