DOCUMENTOS DE LA CONFERENCIA EPISCOPAL DE CHILE

Desde su conformación, en la década de los años 50, la Conferencia Episcopal de Chile ha sido protagonista de la vida nacional la que, a su vez, ha ido acusando en forma creciente tanto una ideologización de la actividad política, entendida como núcleo de la convivencia social y de la estructura y funcionamiento de la sociedad, como un significativo distanciamiento de la vida religiosa y de las exigencias morales que son parte de la prédica evangélica.

Resulta apreciable el esfuerzo de los Obispos, en tanto expresan su pensamiento en forma colectiva, para evitar tomar posición sobre los propósitos concretos de las diferentes colectividades políticas. Han debido enfrentar momentos de fuertes crisis y traumas que afectan a toda la sociedad y que urgieron un pronunciamiento, un parecer y una orientación, que pesó en el escenario político. Se entrecruza este actuar en la vida política con los nuevos problemas morales y culturales, los que al mismo tiempo pueden ser considerados como causa y efecto de las nuevas condiciones políticas, económicas y sociales que ha vivido el país en casi medio siglo de su historia.

Es necesario distinguir, y de algún modo clasificar, los documentos y material que emite la Conferencia Episcopal. Un grupo especial lo constituyen las Orientaciones Pastorales, cuyo propósito es centrar a los cristianos en los diferentes ámbitos de su labor; aún cuando tienen un carácter eminentemente pastoral, abarcan una amplia gama de temáticas que incluyen a la sociedad, a la política, y la economía, teniendo objetivos y metas de mediana duración y, en este sentido, tienen un carácter programático. Un segundo grupo de documentos es de clara respuesta a situaciones que nacen en el acontecer nacional y que requieren de una orientación particular por parte de la Jerarquía. Por su diversidad y por la importancia de sus contenidos hay algunos que destacan por su extensión (lo que mostraría la preocupación de elaborar un pensamiento significativo al acontecer nacional), como por su profundidad.

Dentro de este mismo grupo hay una serie de documentos de extensión más bien breve, que deben ser leídos en una continuidad para apreciar los problemas que han ido reclamando la atención de los Obispos. Así como las Orientaciones Pastorales tienen un mismo destinatario: los católicos; el segundo grupo se dirige tanto a los católicos como a la comunidad política nacional. Un caso particular lo constituyen los llamados Documentos de Trabajo que, atendiendo a problemas de la vida nacional, son dirigidos solamente a los católicos. Ambos grupos de documentos evidencian la voluntad de la Jerarquía de la Iglesia para cumplir el rol orientador que le compete.

Sin embargo, los temas que preocupan al Episcopado nacional han ido cambiando su énfasis como respuesta a las condiciones históricas de nuestro país. Es así como, en una primera aproximación, en los años sesenta el tema nuclear fue el derecho a la participación política, con la consecuente integración de grandes sectores de la sociedad en los procesos políticos. Una segunda etapa, años setenta y ochenta, fue el tema de los derechos humanos y la recuperación del sistema democrático para, finalmente, en nuestros días, abocarse a los temas relacionados con la cultura, la economía, la bioética y la sexualidad en un trasfondo de relativismo moral de la sociedad contemporánea. Junto con ir respondiendo a las circunstancias históricas del país, también destacan los temas que van en conexión con los documentos del Magisterio Universal y con las orientaciones de la Conferencia Episcopal Latinoamericana.

Bibliografía

ALIAGA, F. La Iglesia en Chile. Contexto histórico, Santiago 1985

MENDOZA, J. La Conferencia Episcopal de Chile y el tema valórico. 1962-2009, Valparaíso 2011.

JORGE MENDOZA