PANAMÁ; Algunas manifestaciones musicales del folklore
Sumario
Principales ritmos y bailes
Por su condición de país de tránsito, aunque ha recibido la influencia de tradiciones musicales del mundo entero, Panamá ha conservado sin embargo diversas manifestaciones musicales autóctonas de gran arraigo popular. Como resultado de ello, el país ofrece una variedad de ritmos y bailes, tanto propios como de origen foráneo, pero asimilados y adaptados desde hace siglos, lo que constituye parte del patrimonio musical de Panamá.
Según el ámbito geográfico, los bailes, ritmos y manifestaciones musicales encontradas en Panamá son resultado del mestizaje que se dio entre los grupos que se establecieron en nuestro territorio, trayendo consigo sus tradiciones y costumbres, durante la época colonial, la época colombiana y la republicana. Algunos de ellos son:
Tamborito: Es el baile y género musical más popular en el Istmo, reconocido convencionalmente como la más importante expresión del folKlore Panameño. En las regiones interioranas se acompaña con canto de coplas y “refranes”, con tambores y con palmadas; se practica en toda época, y alcanzan su mayor brillo y concurrencia durante los días de carnaval.
Cumbia: Surge del sincretismo musical de los negros procedentes de África, indígenas y españoles (andaluces y gallegos) durante la Conquista y la Colonia. Es un reconocido símbolo del folklore nacional panameño presente en todo el país excepto Bocas del Toro y Colón, con múltiples variantes folklóricas, como la cumbia santeña, el danzón - cumbia, la cumbia "atravesá", la cumbia chorrerana, la cumbia darienita, etc.
Punto: Posee una composición creada específicamente para el baile, ejecutado por una sola pareja que hace gala de donaire, precisión y gracia. Es de pura ascendencia hispánica y es considerado el baile y género musical más bello y elegante de todo el Istmo de Panamá.
Pasillo: Música, ritmo y baile de salón, de origen andino, compartido con Ecuador y Colombia.
Bunde y Bullerengue: Muy populares en la provincia de Darién. Son ejecutados por la etnia afro-darienita.
'Calipso, Mento, Palo de Mayo: Son cantos y ritmos populares de la provincia de Bocas del Toro, de origen afroantillano.
Tambor: Según Dora P. de Zárate, “el tamborito es uno de los bailes de tambor más tradicionales de Panamá, cuya práctica se remonta a los tiempos de la colonia”. El término tambor indica el baile más antiguo y popular, también llamado “tamborito” por el pueblo. Se baila en toda la República, con modalidades regionales. El “tambor de orden” reviste un carácter más exclusivo y no popular. Otras variantes como el bunde, bullarengue y otros, surgieron posiblemente como una interpretación de lo que bailaba la gente culta.
Mejorana: Baile tradicional de las Provincias Centrales, la parte más hispánica que cubre Herrera, parte de Veraguas y Los Santos. Según Narciso Garay, la mejorana instrumental, o mejorana propiamente dicha, se baila al son de la mejoranera, guitarrita criolla a la cual ha dado su nombre esta danza nacional. Es un baile colectivo, en el que los hombres de un lado y las mujeres del opuesto, se hacen frente. Tan pronto marcan el paso como cambian de lugar en el paseo, y en el zapateado. La mejorana vocal no se baila y se le denomina comúnmente socavón.
Este estilo melódico acompaña el canto de los versos o décima escrita y goza de una variedad de ritmos denominados “torrentes”: Llanto, zapatero, cumbia zapateada, cumbia suelta, mejorana X 25, mejorana transportada, punto de gallina, pindingo, socavón, sueste, poncho, llanero, Valdivieso, Peralta y maruchas.
Una décima fija nace de la inspiración de los compositores. Los cantadores la memorizan y trata de buscar el mejor estilo melódico que se forma al tocar una serie de acordes consecutivos con la guitarra. La mejorana o mejoranera, instrumento que acompaña al intérprete de la décima, es una especie de guitarra pero más pequeña, con 5 cuerdas. En un tiempo anterior la mejorana acompañaba al rabel, una especie de violín, y al propio violín. Indican los conocedores que con la Mejoranera se ejecutan los siguientes torrentes:
Tono Mesano: sus movimientos son moderados; se usa para cantar décimas narrativas, de disputas sobre historia, del saber, para el galanteo, para la exaltación de la belleza femenina y la descripción de paisajes naturales.
Zapatero: más rápido que el Mesano, de melodía muy alegre. Se emplea para el canto de lo profano y la picardía de amor.
Gallino: se emplea en lo sentimental, en lo lírico, en el galanteo, en lo romántico, para rogar a Dios,
Valdivieso: se emplea para acompañar disputas del saber.
Socabón: es una melodía que se emplea para acompañar disputas de humor y fantasía. Es muy empleada para las improvisaciones.
Pasitrote: tiene un ritmo de Cumbia lenta, se emplea para la faena y la molienda.
María: es un ritmo más lento se utiliza en “todo género de canto, menos para las disputas”.
Llanto (Lamento): de melodía dolorosa, de angustia o temor, se emplea para acompañar el canto de pasión.
Grito y saloma: son dos formas de expresión utilizadas por el campesino para expresar su estado de ánimo. La saloma es expresión más elevada que el grito: en ella se combinan tonos, ritmos e incluso rima. La saloma es una expresión vocal-gutural que contiene elementos de canto, de grito alargado, versos de alguna redondilla. Se oye durante el trabajo cotidiano, mientras se ordeña, al atardecer. Es una de las expresiones más bellas y típicas del folklore sentimental panameño.
Cantaderas: tienen lugar durante las fiestas pueblerinas, aunque pueden surgir de improviso en un sábado o cualquier día de la semana en cualquier lugar. Es la fiesta de la décima por excelencia. Los géneros de la décima son : “a lo divino”, que tiene como tema o motivo asuntos de orden religioso, o relativos a la historia sagrada. Otros géneros, según la clasificación del profesor Manuel F. Zárate, son: “de argumento”, “chistoso”, “de amores”, o bien, relativos a temas tradicionales, o patrióticos.
Los motivos de las “cantaderas” pueden ser las fiestas de los santos patronos de cada pueblo, la fiesta de Navidad, del Año Nuevo, de Reyes (Macaracas), de Santa Librada (Las Tablas), Las Mercedes (Guararé), San Juan (Chitré), San Sebastián (Ocú). En ocasiones terminan en bellas “serenatas”.
La cuna del folklore panameño es el Festival Nacional de la Mejorana en el poblado de Guararé en la provincia de Los Santos, donde cada año se llevan a cabo concursos para escoger al mejor tamborero, el mejor cantante de décimas y el mejor intérprete de acordeón. Existen en Panamá diversas escuelas y maestros que enseñan el arte de la interpretación instrumental y las danzas folklóricas siendo su punto de encuentro y referencia para la preservación de las tradiciones folklóricas panameñas el "Festival de la Mejorana" y el "Festival del Manito" en Ocú, en la provincia de Herrera. También existen otras manifestaciones igual de importantes pero más focalizas en regiones específicas como: los congos (en la provincia de Colón) y los bullerengues (en la provincia de Darién).
Los bailes típicos más populares además del tamborito son: el punto, el atravesao y el bullerengue. Hay otras danzas como: la de los diablicos, los grandiablos, los congos, los cucuás, el torito, la pajarilla, danza de los Cuenecué o negros bozales y las danzas indígenas.
Congo: Entre las tradiciones de origen africano, los “Congos”, un género musical y baile Afrocolonial concentrados principalmente en la Costa Arriba y Costa abajo de la Provincia de Colón; se asocia casi siempre con una especie de representación mímica y teatral que tiene como temática episodios históricos del comercio negro, de la esclavitud y las consiguientes rebeliones negras durante los tiempos de la conquista y de la colonia Bullerengue: según Dora P. de Zárate, eminente folclorista, quien con su esposo Manuel F. Zárate han investigado el folclor de todo el país y escrito varios ensayos sobre el tema, se trata de una variante del tamborito, localizado en el Darién. Es un baile muy difícil de ejecutar para los que no han nacido en la tradición etnio-darienita.
Bunde: Es una forma especial de tambor que se usa en los días de navidad en las poblaciones del Darién, principalmente en la de Garachiné. Los instrumentos que se usan son un cajón que se toca con las manos y un par de maracas. La actividad del bunde se inicia el ocho de diciembre y termina el 6 de enero; ella constituye una forma realmente popular propia de la celebración de la Navidad.
La tamborera: Es un género musical creado por el gran músico panameño Ricardo Fábrega durante la primera mitad del siglo XX, nacido del Tamborito y la Cumbia panameña mezclado con el son y danzón cubano, cuyo objetivo era identificar cada uno de los sectores geográficos del país, con propósito de integrarlos a su devoción por las instituciones raizales de nuestra identidad cultural. La Tamborera se dio a conocer en todo Latinoamérica por su famosísima canción "Guararé" que forma hoy parte de los clásicos de la música latinoamericana, por la "Cocaleca" y por el “Tambor de la alegría”, quizás la tamborera más conocida a nivel Latinoamericano y cuyo texto se relaciona directamente con Panamá y sus tradiciones.
Instrumentos musicales usados en Panamá
Percusión: Tambores, Flauta, Caja o Tambora Rumbo (4 cañas), Redoblante (para las Danzas del Corpus), Rabel, Armónica, Almírez (del folklore de Antón) Mejoranera (5 cuerdas) Acordeón, Triángulo Violín, Gaita, Castañuela (danza de Diablos Sucios) Guitarra Española , Churuca o Guaracha ,Maracas o güiro, Zambumbia (del folklore de Chiriquí.); Cuerda: Arco, Rumbo (4 cuerdas), Rabel, Mejoranera (5 cuerdas), Violín, Guitarra Española; Viento: Flauta, Pito o caña, Armónica, Acordeón, Gaita.
Los cantantes populares, acompañados frecuentemente con la guitarra española de seis cuerdas, o ya cada vez menos, con la guitarra criolla panameña: la Bocona, Mejoranera o Socavón, de cuatro cuerdas, cantan por lo general inicialmente décimas aprendidas, escritas por múltiples autores, cultores de este género de canto, y posteriormente continúan, con el contrapunto o el “gallino picao”, con décimas improvisadas de amor, de picardía o chacotería y el canto por la soberanía.
Otras tradiciones son la música de las Danzas de Corpus, la música con que se cantan los rosarios de la aurora, los juegos de ronda, las salomas, entre otros.
Danzas del Corpus Christi en La Villa de Los Santos
En La Villa de Los Santos, en la Provincia de los Santos, con el correr de los años las celebraciones del Corpus han tomado forma a través de un ciclo festivo que inicia con la Víspera de la Santísima Trinidad, donde una representación teatral tiene su significado con lo que se denomina El diablo encueta’o que marca el inicio de todo el ciclo religioso – tradicional. Estas representaciones teatrales se han dado a través de los años con la participación de la llamadas diabladas cuyos máximos exponentes son los Diablicos Sucios que representan una pantomima del mal o sea el demonio que trataba de asustar y amedrentar a los incrédulos de las cosas de la iglesia, dándose el sábado antes de la celebración de la Santísima Trinidad.
Luego el siguiente miércoles se celebra La Víspera de Corpus con una representación teatral, ahora con otra forma de diablos demonios “Grandiablo o Diablicos Limpios”, quienes “cuartean” el Sol, dividiéndose el Astro Rey en cuatro partes como representación del dominio total del Mundo. A las doce del mediodía de cada día, se dan estas representaciones que han sido trasmitidas a través de la tradición oral. La noche de la víspera del Corpus, no se duerme y la gente trasnocha entre juergas, cantores y juglares hasta que aproximadamente al amanecer todos van en busca de El Torito, una de las danzas que tiene representación en estas festividades y ya es precisamente el gran día, el Jueves de Corpus Christi cuando se inicia a las 10:00 de la mañana la tradicional Misa de Corpus Christi con representaciones dentro del templo y luego La Procesión del Corpus Christi donde el Santísimo Sacramento del Altar recorre algunas calles del pueblo, donde se han dispuesto altares y alfombras de flores para recibir la visita del Santísimo y las Danzas Tradicionales acompañan esta procesión.
Otras manifestaciones: música religiosa
Son numerosas las expresiones en esta área. La “Misa del Javier” fue compuesta para jóvenes. La “Misa típica de San Miguelito” de los maestros Pepe Ríos y Franco Poveda, es eminentemente campesina: utiliza los ritmos del torrente, llano mejorana y zapatero y usa los instrumentos típicos del campo: bocona, guitarra, repicador, caja etc.
El jesuita Néstor Naén (fallecido) es autor de la “Misa típica” en la que utiliza los aires de música interiorana (tamborito, cumbia, tamborera) y de villancicos que tienen como telón de fondo la realidad religioso-social del ambiente (“Vamos al portal con tamborito de Panamá”); de su autoría es la “Misa de los Quinientos años”, caracterizada por acoplar ritmos del folclor latinoamericano.
La compositora Gladys de la Lastra (fallecida) es autora más de 150 composiciones, entre las que se destacan los villancicos y numerosas tamboreras con letra inspirada en temas religiosos, que gozan de gran popularidad.
Edgardo de León compuso una serie de villancicos panameños, compuestos exclusivamente con salomas, lamentos y tonadas regionales de Las Tablas y otras provincias.
Otras manifestaciones son las posadas de Navidad, el Velorio cantado, las Danzas de Bugabita, los festivales, conciertos y concursos de coros que tienen lugar en la época de Navidad en la capital y en las provincias, con características regionales.
Bibliografía
GARAY Narciso, Tradiciones y Cantares de Panamá, Bruselas, Presses de L’Expansion belge, 1930
REVILLA ARGUESO, Ángel, Cultura Hispanoamericana en el Istmo de Panamá, ECU Ediciones, Panamá, 1987
WOLFSCHOON Erick. Las manifestaciones artísticas en Panamá. Panamá, Industrial Gráfica, S.A., 1983
ZARATE Manuel F., PÉREZ DE ZÁRATE, Dora, “La décima y la copla en Panamá”, 1er Premio del Concurso Ricardo Miró de 1952, 1ª. Edición, impreso en los Talleres de la Estrella de Panamá.
ZARATE Manuel F., Tambor y socavón, Panamá, 1er premio en la Sección Ensayos del Concurso Ricardo Miró con la colaboración de Dora P. de Zárate, impreso en los Talleres de la Imprenta Nacional. Edición de la Dirección Nacional de Cultura del Mins. de Educación, 1962.
ZARATE Dora P. de, Textos del tamborito panameño, Panamá, 1971
Internet: Augusto Fábrega D., “Manifestaciones destacadas del Folklore panameño”, http://www.educapanama.edu.pa
MANUELITA NÚÑEZ CASTILLERO