LÓPEZ DE HERRERA, Fray Alonso
(México 1579; México, 1654?) Dominico, pintor
Alonso López de Herrera, uno de los pintores más notables del virreinato de la Nueva España, nació en febrero de 1579 en la ciudad de México y fue bautizado el día 24 del mismo mes y año en el monasterio de Regina. Sus padres, Juan López de Herrera y Magdalena López, eran vecinos de la Parroquia de la Santa Veracruz. Al parecer su padre era hermano de la esposa de Francisco de Montejo, el adelantado de Campeche y Yucatán.
Los únicos documentos sobre su vida del que se tienen noticia son: su fe de bautismo y la Segunda parte de la historia de la Provincia de Santiago de México, escrita por fray Alonso Franco en la cual menciona que, por el año de 1622, en el convento de Santo Domingo de la ciudad de México estaba un novicio que era un gran pintor y superior maestro de pintura llamado fray Alonso López de Herrera. De este escrito se deduce que debió haber tomado el hábito dominico a los cuarenta y tres años de edad, y para ese entonces era ya un consumado artista. Como novicio pintó fray Alonso el retablo de la capilla mayor de su convento, tan grande que abarcaba todo el testero y, como escribe fray Alonso Franco en su obra arriba señalada, “tan excelente y primoroso que es la cosa mejor de esta materia que hay en Nueva España.”
Manuel Romero de Terreros poseía un cuadro pintado sobre lámina de cobre representando a Santo Tomás de Aquino, y en la antigua Academia de San Carlos existía otra pintura de la Santa Faz que ofrece grandes semejanzas con la de Santo Tomás de Aquino “puesto que la nariz, los labios y los ojos de ambos rostros son de idéntica factura.” Romero de Terreros escribe que “nos inclinamos a creer que esta «Santa Faz», por su más esmerada ejecución, es posterior a la que pintó en Puebla, y existe hoy en aquella Catedral… También en Puebla pintó López de Herrera un hermoso Divino Rostro al óleo sobre tela, de 0.45 por 0.35, que hoy forma parte de la colección de Pérez de Salazar.”
Debió haber sido hacia el año de 1634 cuando fray Alonso López de Herrera pintó el Divino Rostro que se encuentra en el Altar del Perdón de la Catedral de México. Y si todo gran artista tiene siempre una obra maestra, sin duda la de López de Herrera es el cuadro de la Asunción de María. De ella escribe Romero de Terreros que “se exhibía en las galerías de la antigua Academia de San Carlos (…) Admírase en la «Asunción de María», una excelente composición, un brillante colorido, habilísimos escorzos, y verdadera maestría en el dibujo de las manos. Está pintada en tabla y es de grandes dimensiones, puesto que los personajes que representa son de tamaño natural”
Aunque se desconoce la fecha del fallecimiento de fray Alonso, se estima que debió haber ocurrido hacia el año de 1654. En 1712 fray Antonio Moxica escribió en su obra “Tesoro escondido..del noviciado de los frayles predicadores”, que “tuvimos un Apeles en sus dedos, en el nombre de Fr. Alonso López de Herrera, hoy en la voz de todos «divino»; hoy todavía goza de este predicado, habiendo mucho tiempo que murió este sujeto: pues luego que se ve una buena pintura, se dice que será del «divino Herrera».”
BIBLIOGRAFÍA:
Manuel Romero de Terreros. El Pintor Alonso López de Herrera. Cultura, México, 1934, http://www.analesiie.unam.mx/pdf/34_05-14.pdf
JUAN LOUVIER CALDERÓN